
Ver la televisión no es una de mis actividades favoritas, son contados los canales y programas de televisión que me gusta ver, pero este desinterés por ver la televisión se convierte en odio al ver la cantidad de anuncions de medicamentos que nos borbandean en la televisión, promoviendo un acto tan irresponsable por parte de las personas como es la automedicación.
Un día mientras veía televisión en la playa se me ocurrió contar cuántos cortes comerciales pasaban en una sección y cuántos de éstos eran sobre medicamentos, el resultado fue el siguiente: 15 comerciales en total, de los cuales 10 eran sobre medicamentos. Asunto terrible éste, del cual no se hace nada por regular. El gobierno tendría que hacer algo para evitar esto o las consecuencias se empezarán a ver pronto.
Lo peor de todo es que no solamente promocionan el nombre del medicamento sino que además promocionan principios activos que todavía no han sido estudiados correctamente o de los que no hay artículos científicos confiables. Te prometen resultados muy risibles como lo de orinar la grasa que comemos (suceso imposible fisiológicamente hablando) o pérdida de 8 kgs a la semana. Además de todo al terminar el comercial te dan la dosis ("para migraña tome dos pastillas, para dolor de cabeza tome una") para que salgas corriendo a la farmacia a comprarlo y lo peor: cuando vas a la farmacia los medicamentos que están a la vista son los producidos por estos laboratorios de tercera, medicamentos de mala calidad y medicamentos que la gente no conocedora del tema considera como lo último de la farmacología. Especial odio le tengo a los famosos acomerciales de Lolita Ayala "Información que Cura", en los cuales ella que no es doctora te da la consulta por televisión en la cual se pone a decir una sarta de tonterías y estupideces y para terminarla de fregar al final de "la consulta" te dan tu medicina, que terrible es eso!!!
También es común ver gente que va a "consultar" a la farmacia, una vez vi que un señor fue a consultar por su hijo que tenía diarrea (suerte que era adolescente y no niño), además de que la señorita que atendía (muy poco informada en cuestión de farmacologia) le dio un antibiótico, le dijo que se tome un antidiarreico a dosis de una pastilla cada 4 horas, cuando esta era una medicina indicada para cada 12 horas, espero no se haya muerto ese pobre muchacho.
Otra cosa que pasa mucho es ver que las mamás tienen en su cajón un montón de cajas de medicina que tienen cosas escritas como: para el dolor de garganta, para la panza, para la cabeza, para el dolor de dedo, creen que sólo para eso sirven o que siempre que te da ese dolor tienes que tomar eso solamente porque el doctor la recetó en una ocasión. Una vez le dije a mi mamá me duele la garganta y enseguida sacó la cajita que decía "para la garganta", era un antibiótico, por suepuesto que no lo tomé.
Todo esto ha influido tanto en la mentalidad de las personas que ahora parece que la sociedad está enferma, apenas sienten algo extraño ya quieren tomar su medicina o van al doctor exigiendo tal medicina que vio anunciada y cuando el doctor no da medicinas porque no están indicadas las personas dicen que es un mal médico. Las personas se toman sus pastillas como si fueran dulces y por cualquier tontería que sienten, es muy común observar abuso de sustancias medicamentosas entre la población en general.
Muchos de los medicamentos que se anuncian por televisión son totalmente inservibles y otros pueden tener graves complicaciones para determinados tipos de población incluyendo la muerte, la gente no entiende que las medicinas son sutancias delicadas y que solamente se deben utilizar cuando éstas están indicadas y cuando NO están contraindicadas, las únicas personas capacitadas para recetar son los médicos, ni Lolita, ni la vecina ("yo tenía algo parecido y me dió esto el doctor, tómatelo es bueníííísimo"), ni la tele, ni el que atiende en la farmacia, solamente los médicos.
Espero que el gobierno haga conciencia y prohiba esas comerciales que tanto daño le pueden hacer a la sociedad. Para los que creían que los doctores que salen en los comerciales son verdaderos, basta ver su estetoscopio para comprobar que es un actor disfrazado de médico, siempre tienen estetoscopios de esos desechables que cuestan $100. No le hagamos caso a los comerciales, consultemos con alguien que de verdad sabe de medicina y promovamos la cultura del No a la automedicación.