Del Crepúsculo al Amanecer

Todos habrán notado la euforia que surgió entre los lectores, especialmente el público femenino en edad adolescente, durante el último año en el ámbito literario y que llegó a la pantalla grande, por supuesto que estoy hablando sobre la saga de novelas de Crepúsculo. Esta euforia no estuvo limitada únicamente al público adolescente sino que incluso se dió entre las mujeres adultas y voy más allá, incluso se dió entre hombres de todas las edades que nos atrevimos a leer los libros, nunca sin recibir al menos una burla como consecuencia de esto.

Hoy en día no se da mucho eso de reflexionar lo que se lee o si eso que leímos es bueno o malo, por lo tanto hoy quiero hacer una muy breve reflexión sobre esta serie de libros.

Lo primero que debo decir es que al principio al ver que estos libros estaban tan de moda mi primera reacción fue odiarlos, sin embargo después de ver la película, ésta no me desasgradó y me propuse leer los libros, al terminar de leerlos debo aceptar (pese a las burlas) que me gustaron, incluso me lleve una buena impresión hasta cierto punto de que no eran de tan mala influencia para las personas como lo han sido otros libros que también han estado de moda.

Entre las cosas buenas que se pueden encontrar estan: El respeto y amor que existe de Bella por sus padres, a los cuales trata de obedecer y complacer. El interés por parte de Edward de permanecer vírgen hasta el matrimonio, en la novela se deja muy en claro el valor de lo que esto significa para la pareja y para uno mismo. la perseverancia de no ir contra las reglas y tratar de solucionar las cosas de manera pacífica, como sucede cuando los Vúlturi quieren acabar con la familia de Carlisle. El interés de los vampiros "vegetarianos" por no querer ser malos al no querer comer sangre humana y por lo tanto el respeto a la vida humana. El gran ejemplo que da Bella de no querer abortar a su hija incluso cuando ésta le hacía daño y al final se logra la vida de las dos. La vigencia y la posibilidad del matrimonio para toda la vida. Entre algunas otras cosas más.

Entre las cosas malas encontramos: La inmadurez con la que actúan varios personajes, como cuando Bella arriesga su vida con las motos. El hecho de no poder soportar la pérdida de alguien al punto de suicidarse, como lo quería hacer Edward. Puede llevar a las jóvenes a interesarse por los hombres extraños, oscuros, por así decir los malotes, como es el caso de Bella con Edward que era el solitario de la escuela. Muchas narraciones son demasiado explícitas para el público al que va dirigido. La actitud de Bella, que se le insinúa a Edward toda la novela y la autora hace parecer que eso está bien. Propone un amor fantasioso e inxistente, por culpa de esto las adolescentes buscan amores que nunca van a encontrar. Se somete la felicidad de uno a costa del otro. Se pone lo malo (los vampiros) como algo bueno y atractivo. Entre muchos otros.

En fin no considero estas novelas como de una buena influencia como una personita se esperanzó en creer alguna vez, ni tampoco las considero con una influencia mala realizada deliberadamente como en el caso de otras novelas, simplemente son novelas que se deben leer con cuidado sabiendo que contienen elementos que pueden ser negativos para nuestra formación y que van en contra de nuestros valores. Cada uno de nosotros debemos tener criterio ante las cosas que leemos, ese criterio lo formamos de la mejor manera conociendo los valores que nos propone Jesús a través de la Iglesia Católica.

El mundo demoniaco ¿realidad o ficción?

En estos días en los que mucha gente cree que la sociedad ha superado los días de la religión y del terreno de lo espiritual, es muy común conocer a mucha gente que no cree en la existencia del Diablo y los demonios, incluso muchos se burlan de los que si creemos en esta realidad.

Siempre los cristianos hemos creído en la existencia de Satanás, como se le conoce al príncipe de los Avernos y por lo tanto la Iglesia siempre ha enseñado sobre la existencia de estos seres malvados, la Iglesia enseña sobre el Maligno porque Jesús mismo lo hizo. Sin embargo el Diablo está muy interesado en que las personas no creamos en el, de hecho ésta es su mejor estrategia para hacernos caer en tentación, la razón es muy sencilla: si las personas no creen en Satanás entonces el puede influir en nuestra vida sin que estemos advertidos de su presencia y por consiguiente caemos en tentación. Por esto actualmente hay una mayor influencia demoniaca en el mundo que en épocas anteriores.

Los demonios son seres espirituales (no tienen cuerpo) de naturaleza angélica que fueron creados por Dios como cualquier otro ángel pero que debido a la soberbia en sus corazones de querer ser como Dios se bestializaron poco a poco y se fueron llenando de odio hasta que por este pecado no pudieron estar más en la presencia de Dios y entonces tuvieron que ser apartados de El. Son seres muy inteligentes, mucho más que nosotros y por eso tratar de vencer a un demonio sin ayuda de Dios es imposible. Su naturaleza, llamada preternaturaleza, es diferente a la de los hombres, ellos pueden hacer cosas que nosotros no podemos como por ejemplo hacer levitar un objeto, pero no pueden hacer cosas que solamente Dios puede como crear algo de la nada.

Hay demonios más malos que otros y demonios más poderosos que otros, pero todos están llenos de odio a Dios y a los hombres y por esta razón no se arrepienten ni quieren el perdón de Dios (no es que a Dios le falte misericordia, es que ellos no quieren su perdón), llenos de maldad y quieren influir en nuestra vida y que como ellos nosotros nos apartemos de Dios. Sin embargo nosotros estamos protegidos por Dios y por esta razón la influencia que tienen en nosotros es limitada, un demonio podría matarnos en un segundo pero Dios no lo permite. La influencia más común es incitarnos a cometer pecado: la tentación. Como dije son seres muy inteligentes y ellos nos conocen y saben cuál es la mejor manera de tentarnos o en qué momento hacerlo, por esta razón debemos permanecer en continua oración para no caer en tentación como Jesús nos pide.

Como católicos debemos creer en el Demonio y no tener miedo de El, porque Dios es mucho más poderoso y nos ama infinitamente, Satanás no puede influir más allá de la tentación si nosotros no le abrimos las puertas de nuestro corazón, el ha sido derrotado por Jesús en la cruz. No debemos acercarnos a el, solamente quiere nuestro mal y apartarnos de la felicidad que solamente se encuentra en Dios. Algo importante es que por ser creatura de Dios, no debemos odiarlo, así como tampoco debemos odiar al ser humano más malo. La mejor manera de mantenernos alejado de El es acercarnos a Dios por medio de la oración, los sacramentos, la Biblia, el ayuno, etc. No nos preocupemos por estar lejos de Satanás, mejor preocupémonos por estar cerca de Dios.

La Astronomía

Sin duda alguna la astronomía es una de mis profesiones frustradas, sería muy feliz estudiando astronomía aunque tal vez quedaría loco (ya ven que dicen que muchos astrónomos quedan locos de no poder comprender lo maravilloso del Universo). Siempre desde niño ésta ha sido una de mis ciencias favoritas y siempre se me ha hecho muy fácil aprenderla, pero nunca mis conocimientos en esta materia habían crecido tanto como lo hicieron en este verano.

Esto se debe a que mi linda novia en mi cumpleaños me regaló un telescopio, algo que siempre había querido tener. Digamos que es un telescopio para principiantes de tan solo 60 mm de abertura pero con el que un principiante puede aprender muchísimo de lo básico de la astronomía. Obvio antes de empezar a utilizarlo tuve que recurrir a la investigación en la red y hasta mi libro de astronomía me compré.

Nunca olvidaré la primera vez que vi de cerca la Luna y Júpiter con sus satélites (que son los astros que mejor se ven con mi telescopio), también logré ver algunas galaxias y cúmulos y eso sí muchas pero muchas estrellas. Sin duda alguna si antes de este verano me fascinaba la astronomía, ahora se ha convertido en una ciencia sobre la que aprenderé toda mi vida.

El Universo refleja el rostro de Dios, el Universo es infinito como su Creador, es maravilloso como su Creador, es tan misterioso e incomprensible como su Creador, como dice aquella frase: la obra refleja al artista. Es sumamente difícil comprender los origenes del Universo, los fenómenos que se dan en el, las distancias enormes que separan a sus astros y la belleza que hasta los astros más "feos" (como la Luna) proporcionan al ojo humano, o mejor dicho al lóbulo occipital humano.

Esta es una ciencia que emociona a muchos por su complejidad, les propongo investigar un poco sobre ella les aseguro que quedarán maravillados y no podrán evitar ver a Dios presente en nuestro Universo.

Con Cristo todos somos Iglesia

El título de esta entrada fue el lema de la pascua juvenil de este año, ya que ésta se trató sobre la Iglesia y el día de hoy quiero analizar un poco este lema tan importante pero muchas veces tan ignorado.

Muchas personas, incluidos muchos católicos sin una formación adecuada piensan que la Iglesia solamente la forman los sacerdotes y los religiosos y religiosas y por eso es común escuchar frases como "yo creo en Dios pero no en la Iglesia", "soy católico a mi manera", "La Iglesia es una corrupta", etc. Comentan estas cosas ignorando que todos los bautizados formamos parte de la Iglesia, aunque no seamos sacerdotes u obispos, los laicos también somos la Iglesia de Cristo porque por medio del bautismo nos hacemos miembros de la Iglesia. Si entendemos esto comprenderemos que al hacer este tipo de comentarios nos atacamos a nosotros mismos.

Mucha gente no se siente parte de la Iglesia porque creen que no juegan un papel importante dentro de ella, sin embargo tanto sacerdotes como religiosos y laicos tenemos funciones importantes aunque diferentes y lo que cada bautizado hace o deja de hacer influye en toda la Iglesia para bien o para mal. Esto es así porque así lo ha querido Dios: que hayan diferentes funciones pero todos formando parte del mismo cuerpo que es la Iglesia como lo ejemplifica San Pablo en sus cartas.

Sin embargo no es suficiente entender que todos los bautizados formamos la Iglesia, también tenemos que comprender que Jesús es el miembro más importante de ésta, El también forma parte de ella, por lo tanto seguir a Jesús pero no seguir a la Iglesia es un absurdo. Si uno de nosotros fallamos la Iglesia se afecta, pero sin Jesús, la Iglesia no puede existir.

Cosa diferente es el Magisterio de la Iglesia, el cual si es formado por el Papa junto con los obispos y es el encargado de interpretar las Sagradas Escrituras, tomar las decisiones más importantes y enseñarnos la manera correcta de seguir a Jesucristo. Por lo tanto nosotros no podemos interpretar las cosas a nuestra manera ni seguir a Jesús a nuestra manera (si así fuera todo sería un caos) gracias al Magisterio, la Iglesia se ha mantenido y se mantendrá para siempre porque como el mismo Jesús dijo: "Las fuerzas del infierno no prevalecerán sobre ella".

Las principales características de nuestra Iglesia son cuatro:

Una: Por su origen y porque tenemos una sola fe.

Santa: Porque su fundador (Jesús) es santo, porque sus miembros estamos llamados a ser santos y porque es santificadora.

Católica: Porque es universal, es para todos.

Apostólica: Porque está fundada en los apóstoles.

Algunos se preguntarán entonces que por qué la Iglesia comete errores, algunos han sido muy graves. Esto tiene su explicación en que es una institución divina, guiada por el Espíritu Santo, pero también es una institución humana, manejada por hombres y desde que un católico cometa un error la Iglesia comete un error, por lo tanto la Iglesia no es perfecta sino que se encuentra en camino a la perfección.

Por lo tanto debemos amar la Iglesia porque Jesús mismo la fundó como medio de salvación para los hombres, debemos defenderla y propagarla porque es el lugar en donde nos encontramos con Dios. Seamos humildes y aceptemos sus enseñanzas y no olvidemos que Jesús mismo nos habla a través de ella.